La enfermedad de Crohn es una enfermedad intestinal, la cual
causa una inflamación del tubo digestivo, que puede producir dolor abdominal,
diarrea intensa, fatiga, adelgazamiento y desnutrición.
La enfermedad de Crohn suele propagarse hacia la profundidad de las capas del tejido intestinal afectado, ocasionando dolor intenso y debilidad, y en algunas ocasiones complicaciones las cuales pueden ser mortales.
Esta afección no tiene cura, pero con tratamiento y terapias
se pueden reducir los síntomas, logrando que las personas afectadas por esta
enfermedad puedan desempeñarse lo más normalmente posible.
Entre los factores los cuales pueden aumentar los riesgos
den padecer la enfermedad de Crohn se encuentran:
Sistema inmunitario que no funciona adecuadamente.
Antecedentes familiares.
Estar en una edad alrededor de los 30 años.
Fumar.
Consumir alimentos con alto contenido de grasa.
Las complicaciones relacionadas con la enfermedad de Crohn
se relacionan con:
Desarrollo de úlceras en cualquier parte del tubo digestivo.
Obstrucción intestinal.
Fístulas.
Desarrollo de fisura anal.
Desnutrición.
Riesgo de padecer cáncer de colon.
Anemia.
Osteoporosis o artritis.
Trastornos de la piel.
Enfermedades hepáticas o de la vesícula.
Reacciones adversas o derivadas de los medicamentos usados
para tratar la enfermedad.
Entre las pruebas usadas para diagnosticar la enfermedad de
Crohn se encuentran:
Análisis de sangre: Mediante esta prueba de laboratorio se
busca detectar la presencia de anemia o infecciones.
Análisis de heces: En esta prueba se analiza una muestra de
heces en busca de detectar la presencia de sangre oculta en las heces.
Colonoscopia: Este procedimiento consiste en el examen del
colon mediante el uso de un tubo delgado, flexible, que se encuentra equipado
con una pequeña cámara. Este procedimiento también permite tomar pequeñas
muestras de tejido (biopsias) para su análisis en el laboratorio, en el cual se
busca confirmar la presencia de células inflamatorias llamados «granulomas»,
que puede ser indicio de la enfermedad de Crohn.
Tomografía computarizada: Esta prueba consiste en el uso de una
técnica especial de rayos X que proporciona imágenes más detalladas que las de
una radiografía convencional. Se usa para evaluar todo intestino, así como los
tejidos que se encuentran fuera de este.
Resonancia magnética: este procedimiento utiliza ondas de
radio para crear imágenes detalladas de los órganos y los tejidos. Se usa
especialmente para evaluar la posible presencia de una fístula alrededor de la
zona anal o el intestino delgado.
Cápsula endoscópica: Este procedimiento consiste en hacer
ingerir al paciente una cápsula que tiene una cámara, la cual captura imágenes
del intestino delgado y la transmite a un grabador. Luego de esto la cámara es
eliminada del cuerpo sin dolor a través de las heces.
Enteroscopia asistida por balón: Esta prueba utiliza un dispositivo
llamado endoscopio junto con un dispositivo llamado sobretubo, para observar
con mayor profundidad el intestino delgado.
La enfermedad de Crohn no tiene cura, por lo cual el
tratamiento para esta afección suele centrarse en mejorar los síntomas, y en
algunas ocasiones, además de aliviarlos, pueden ayudar a la atenuación o
desaparición a largo plazo.
Entre las posibles opciones de tratamiento se encuentran:
Además de esto puede ser recomendada una dieta con bajo
contenido de fibra o residuos para disminuir el riesgo de bloqueo intestinal en
caso de existir un estrechamiento del intestino.
El procedimiento de cirugía consiste en la extracción de la
porción dañada del tubo digestivo, para luego reconectar las secciones sanas.
Además de esto la cirugía también puede usarse para cerrar fistulas y drenar abscesos.
Algunos consejos para la enfermedad de Crohn son:
No fumar.
Seguir las indicaciones del médico.
Controlar el estrés.
Llevar una dieta variada y equilibrada.
Correo ocupado
Correo aceptado
Al registrarte, estarás aceptando nuestros Términos y Condiciones.