El infarto cerebral, también conocido como accidente cerebrovascular es una urgencia médica la cual debe ser tratada inmediatamente. Es una de las causas principales de incapacidad recurrente en adultos, además de ser una de las segundas causas de muerte.
El infarto cerebral suele ocurrir cuando el suministro de sangre que va hacia el cerebro, es interrumpido o reducido, lo cual causa que el tejido cerebral no pueda recibir oxígeno y nutrientes, ocasionando las neuronas cerebrales empiecen a morir en cuestión de minutos.
Una reacción temprana ante un infarto cerebral puede reducir al mínimo el daño al cerebro así como la posibilidad de complicaciones. Actualmente los infartos cerebrales pueden tratarse y prevenirse, logrando así evitar muertes y complicaciones en muchos casos.
Las causas responsables de los infartos cerebrales suelen estar relacionadas con rotura de vasos, arterias bloqueadas y pérdida de sangre. Entre las causas responsables se encuentran:
Infarto cerebrovascular trombótico: Producido por la formación de un coágulo sanguíneo (trombo) en una de las arterias que suministra sangre al cerebro, causando una una reducción del flujo sanguíneo u otras afecciones de las arterias.
Infarto cerebrovascular embólico: Es producido por la formación de un coágulo sanguíneo (émbolo) u otras partículas lejos del cerebro, generalmente en el corazón, el cual suele trasladarse mediante el torrente sanguíneo para alojarse en arterias del cerebro más estrechas.
Dentro de esto los tipos de infartos cerebrales hemorrágicos suelen ser de hemorragia intracerebral (cuando rompe un vaso sanguíneo del cerebro, derramando sangre en el tejido cerebral que lo rodea, lo que ocasiona daño a las neuronas cerebrales) y Hemorragia subaracnoidea (cuando se rompe una arteria ubicada sobre la superficie del cerebro o cerca de esta, derramándose sangre en el espacio entre la superficie del cerebro y el cráneo).
Además de esto existen ciertos factores de riesgo relacionados con las causas de infartos cerebrales:
Los infartos cerebrales pueden presentar complicaciones dependiendo del tiempo que haya durado el infarto cerebral, y de qué parte del cerebro se haya visto afectada. Entre las complicaciones que pueden originarse se encuentran:
Entre las pruebas que pueden ayudar a diagnosticar un infarto cerebral están:
El tratamiento de un infarto cerebral dependerá del tipo de infarto sufrido:
Tratamiento de emergencia con medicamentos: Incluye el tratamiento con medicamentos para disolver coágulos. Puede ser de forma intravenosa mediante inyecciones.
Procedimientos endovasculares de emergencia: Son procedimientos los cuales se realizan de forma directa dentro del vaso sanguíneo bloqueado, y dependen de las características del coágulo sanguíneo. Pueden ser a través de:
Medicamentos administrados directamente al cerebro: Mediante la inserción de un tubo delgado y largo (catéter) a través de una arteria de la ingle, es colocado en el cerebro para administrar el activador tisular del plasminógeno de manera directa en el lugar en donde se está produciendo el accidente cerebrovascular.
Extracción del coágulo con un estent intravascular: A través de un catéter se manipula un dispositivo dentro del vaso sanguíneo bloqueado en el cerebro, para así atrapar y lograr extraer el coágulo.
Otros procedimientos: Con el fin de disminuir el riesgo de sufrir un nuevo infarto isquémico transitorio, pueden ser recomendados procedimientos para abrir una arteria estrechada a causa de la placa como la Endarterectomía carotídea y la Angioplastia y estents, y así evitar un nuevo infarto cerebral posible.
Una vez lograda la detención de la hemorragia en el cerebro, generalmente se requiere atención médica que apoye mientras mientras el cuerpo absorbe la sangre, pero si el área de la hemorragia es grande, es posible que se necesite la realización de una cirugía para extraer la sangre y liberar la presión del cerebro como la reparación quirúrgica de vasos sanguíneos.
Tras un infarto cerebral el tratamiento se centra el el cuidado para ayudar a recuperar funciones. Esta parte del tratamiento dependerá de la cantidad de tejidos dañados así como de la zona del cerebro afectada.
En el caso de que la zona afectada fuera la del lado derecho del cerebro, los movimiento y la sensibilidad del lado izquierdo del cuerpo podrán verse afectados. Si el lado izquierdo del cerebro fue el que resultó dañado, el movimiento y la sensibilidad del lado derecho del cuerpo podrán verse afectados. Además de esto si el lado izquierdo fue dañado pueden presentarse trastornos del habla y del lenguaje.
Generalmente quienes han sufrido un infarto cerebral pueden experimentar problemas de equilibrio, visión, respiración y deglución. Por estas razones por lo general los sobrevivientes de infartos cerebrales deben recibir rehabilitación, la cual será decidida por el médico según la edad, la salud general y la discapacidad presentada por el paciente. Esta recuperación suele incluir el apoyo de la familia como un factor importante además de la inclusión de un equipo médico especializado, compuesto en la mayoría de los casos por un neurólogo, un médico de rehabilitación (fisiatra), un dietista, un profesional de enfermería, y un terapeuta ocupacional y recreativo.
Conocer acerca de los infartos cerebrales y sus factores de riesgo, así como adoptar un estilo de vida saludable puede ayudar a su prevención. Asimismo en el caso de haber sufrido un infarto cerebral seguir ciertas recomendaciones puede ayudar a evitar el sufrir de un nuevo infarto cerebral:
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