La broncoscopia es una prueba diagnóstica que permite visualizar la vía respiratoria (laringe, tráquea y bronquios de mayor tamaño) y recoger muestras de secreciones respiratorias, tejido bronquial o pulmonar o ganglios del mediastino. En ocasiones puede tener un fin terapéutico.
Los motivos frecuentes por los cuales se necesita una broncoscopia son tos persistente, infección y detección de irregularidades en una radiografía de tórax u otro análisis.
La broncoscopia también puede utilizarse para obtener muestras de mucosidad o tejido, o para eliminar cuerpos extraños u otros bloqueos de las vías respiratorias o los pulmones.
No aplica.
La preparación para la broncoscopia, generalmente, comprende los siguientes pasos: s posible que te pidan que suspendas los medicamentos anticoagulantes (como aspirina, clopidogrel [Plavix] y warfarina [Coumadin, Jantoven]) varios días antes de la broncoscopia. También te pedirán que no comas ni bebas nada entre cuatro y ocho horas antes del procedimiento.
Si decides irte a tu casa después del procedimiento, necesitarás a un amigo o familiar que te lleve. No podrás conducir debido a los efectos prolongados de los medicamentos utilizados durante el procedimiento. También se recomienda tener a alguien que se quede contigo por el resto del día.
La broncoscopia permite:
La broncoscopia, generalmente, se lleva a cabo para encontrar la causa de un problema pulmonar. Por ejemplo, tu médico puede derivarte para una broncoscopia porque tienes una tos persistente o se observan anormalidades en una radiografía de tórax.
En las personas con cáncer de pulmón, un broncoscopio con una sonda ecográfica incorporada puede utilizarse para controlar los ganglios linfáticos en el tórax. Esto se denomina «ecografía endobronquial» y ayuda a los médicos a determinar el tratamiento adecuado. La ecografía endobronquial puede utilizarse para otros tipos de cáncer a fin de determinar si se ha diseminado.
La broncoscopia también puede tratar algunos problemas médicos, a su vez puede utilizarse para extraer obstrucciones o tumores de las vías aéreas o los pulmones, o para colocar un pequeño tubo con el fin de mantener una vía respiratoria abierta (stent). En estos casos, pueden introducirse dispositivos especiales a través del broncoscopio una sonda de electrocauterización para controlar el sangrado.
Para este análisis se utiliza la metodología de exploración.