1. La clave está en el fondo
Para que el fond de teint no se cuartee ni forme zonas oscuras o brillantes, hay que elegirlo según el tipo de piel.
- A la piel grasa le conviene un fluido light o con efecto matificante, o bien un maquillaje compacto en barra o caja. Se aplica mediante pequeños toques con una esponja previamente humedecida.
- La piel seca necesita un maquillaje en crema o uno fluido y nutritivo. Se reparte con pequeños toques por todo el rostro y después se unifica masajeando suavemente.
- Para la piel normal lo mejor es un fluido hidratante o un compacto que no reseque.
- La piel madura precisa un maquillaje cremoso antiedad o un fluido con efecto tensor.
3 errores a evitar
- Olvidarse del cuello, e incluso del escote, cuando se lleva descubierto.
- Utilizar un color diferente o más oscuro que la propia piel.
- Maquillarse con polvos compactos, ya que están pensados solo para matizar zonas y hacerse algunos retoques.
2. Correctores, el toque mágico
- El corrector claro sirve para ocultar manchas, ojeras oscuras y granos. También da relieve a las zonas hundidas del rostro debido a la edad, el cansancio o la fatiga (ojeras marcadas o rictus nasolabial).
- El corrector oscuro profundiza las áreas del rostro demasiado abultadas o grandes, como la papada, los lados de la nariz ancha o el perfil del rostro.
- Un corrector verde oculta las rojeces y las venillas.
3 errores a evitar
- Difuminar el corrector frotando (así se arrastra el maquillaje).
- Usar uno en barra con una piel seca (se cuarteará).
- No difuminarlo suficientemente.
3. Saca más partido a tus ojos
- Sombras. Los tonos claros y brillantes (nácar o metal) agrandan y dan relieve, mientras que los oscuros y mate los empequeñecen dando profundidad.
- Máscara de pestañas. Utiliza la que más te convenga según sus prestaciones: las hay que alargan que espesan y dan grosor a las pestañas, que curvan e incluso transparentes.
- Línea de ojos. Es imprescindible para modificar la forma. Aplicada con lápiz o pincel queda más natural; líquida, más sofisticada.
3 errores a evitar
- Usar sombras en polvo o metalizadas si se pasa de los 50 (se marcan las arrugas).
- Hacerse la línea del ojo con lápiz si se tiene la piel grasa (se corre).
- Darse sombras azules o verdes con ojeras (se acentúan).
4. Buscar la armonía del rostro
Para nuestro cerebro la forma del rostro más bonita es la oval; por eso, cuando no la tenemos y nos acercamos a ella con trucos de maquillaje, nos vemos guapas.
Para saber cuál es tu forma y mejorarla, retírate el pelo del rostro y mírate al espejo de frente. Todos tenemos una medida o eje vertical y uno o dos horizontales que pasan por las zonas más anchas del rostro.
Las cejas, el peinado y el colorete son los tres aliados que mejoran la forma de la cara.
- Alargamos las zonas cortas con líneas rectas u ondas largas.
- Las estrechamos trazando líneas quebradas o redondas y cortas.
- Las suavizamos con tonos ligeros y formas curvadas.
5. El trazo de las cejas
La forma y el color de las cejas tienen un papel fundamental en la belleza del rostro. Es importante eliminar por la parte inferior los pelillos que se salgan de la línea general (así, la mirada tendrá más luz y los ojos parecerán más grandes).
- Si las tienes alborotadas, péinalas con un poco de laca.
- Si son demasiado claras o tienen calvas, oscurécelas con lápiz marrón o gris para que no resulten inexpresivas.
- Si son cortas, intenta alargarlas con trazos cortos.
3 errores a evitar
- Pintarlas de color negro, porque resulta muy artificial y endurece el rostro, o conservarlas oscuras cuando se lleva el cabello rubio.
- Depilarlas en exceso (da a la cara un aspecto anticuado y muy poco natural).
- Llevarlas sin arreglar. No sabes hasta qué punto privas a tu rostro de un plus muy importante de belleza.
6. Maquillar los labios
Un simple toque de color transparente sirve para evitar que los labios se vean descoloridos o con pellejitos.
- Perfílalos antes de pintártelos. Para resaltar o corregir su forma, dibuja, primero, su contorno con lápiz perfilador. Úsalo de color teja porque queda más natural y resulta invisible con cualquier tono labial.
- El segundo paso es pintar el resto de la boca.
- Si la piel está seca, usa una barra nutritiva; si es muy seca añade encima un poco de gloss. Si es normal, emplea una barra hidratante y si se te corre, un labial ultrafijo.
3 errores a evitar
- Utilizar un lápiz perfilador más oscuro que la barra de labios. No es estético ni favorecedor.
- Usar una barra de labios en un tono diferente al del colorete (aunque éste sea más claro). O de un rojo distinto al del traje, si vas vestida de rojo.
- Aplicarse un exceso de gloss de brillo, ya que da la impresión de un contacto pegajoso muy poco sexy.
Fuente: www.miarevista.es
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