Entre cremas, lociones, mascarillas, bases, labiales, sombras y otros productos de cuidado de la piel y maquillaje, una mujer puede usar en promedio 16 artículos al día en su rutina de belleza y arreglo personal, según una encuesta efectuada por la firma de belleza Skincare entre 3.000 mujeres en Estados Unidos.
Para verte mejor
El elevado número –que debe de tener a varias haciendo cuentas mentales– lo relacionan el 70 por ciento de las encuestadas (mujeres entre los 16 y los 75 años) con el bombardeo de una industria que ha añadido pasos y productos a la rutina tradicional de limpieza, tonificación, hidratación y maquillaje, que ahora hace indispensable el uso de sueros, aguas, iluminadores y resaltadores, entre otros artículos.
La mayoría de ellas, sin embargo, no saben con certeza qué se están aplicando ni cuál es la manera correcta de hacerlo. Mucho menos si, por su tipo de piel o su edad, necesitan algunas de las cosas que se echan o si algo de lo que tienen en casa cumple el mismo efecto que esa nueva crema que están a punto de comprar.
“Es importante conocer al menos los principios generales de las cosas que nos aplicamos”, dice Pamela Maquieira, entrenadora de belleza de la firma Sally Beauty, consciente de que muchas no leen la información de las etiquetas o no tienen los conocimientos para entender lo que dice allí.
“Muchas se aplican la crema de noche o de día, según sea el caso, sin haberse limpiado la piel. Esa crema no va a ser efectiva porque no se han retirado las células muertas o no se ha aplicado el tónico, y la piel no está lista para ser nutrida”, señala.
Tal vez por eso, en este sector más que en otros, vale la pena dejarse asesorar de las vendedoras que casi todas las marcas capacitan precisamente para que las clientas no pierdan su tiempo y su dinero comprando cosas que no les sirven o no se saben aplicar.
Vale la pena dejarse asesorar de las vendedoras que casi todas las marcas capacitan precisamente para que las clientas no pierdan su tiempo y su dinero
Escoger y comprar bien
Ana María Carvajal, formadora de la división de Cosmética Activa de L’Oréal Colombia, señala que también es muy importante reconocer las necesidades de nuestra piel y que estas cambian con el tiempo. “De acuerdo con estas necesidades, debemos buscar los componentes que nos ayuden a combatir lo que en realidad queremos cambiar de nuestra piel. Por ejemplo, si busco un producto para disminuir líneas de expresión, deberíamos pensar en hidratantes con ácido hialurónico”.
Una vez identificado el producto, debemos revisar muy bien la sugerencia de uso, que regularmente viene escrita en la caja, o prestar atención cuando recibimos una asesoría.
Carvajal agrega que en “los productos dermocosméticos las concentraciones son altas, por lo que no es necesario usar mucha cantidad. En cambio, el protector solar requiere una cantidad suficiente para garantizar la protección”.
Mujer poniéndose cremas
Las cremas más ligeras deben ponerse primero y luego seguir con las más densas.
Qué untarse, cuánto y cuándo
Con ayuda de las dos expertas elaboramos esta lista, con funciones y forma de aplicación de todos esos productos que acumulamos en el baño. ¡Tomen nota!
LIMPIADORA
Se usa para retirar sudor, toxinas, contaminación o maquillaje. Puede venir en crema, líquido o toallas individuales y se encuentra con enjuague (se retira con agua) o sin enjuague (con algodón). Se debe usar en la mañana y en la noche y se aplica por medio de masajes con movimientos circulares.
HIDRATANTE
Crema o suero que ayuda a aportar agua a la piel. Regularmente se aplica en la mañana con trazos largos, pues esto evita que el sol del día evapore el agua que se encuentra en la piel. Dependiendo de la formulación del producto, aporta agua, vitamina E o antioxidantes que regulan los niveles de humedad normales de la piel.
TÓNICO
Descongestiona la piel a través de componentes que ayudan a terminar la limpieza y sellar la piel, formando una capa protectora que contribuye a que penetren mejor las cremas. Se aplica sobre el rostro con un algodón humedecido, manteniendo la dirección de nuestros tejidos, siempre en forma ascendente.
AGUA MICELAR
Es una de las revoluciones en materia de cuidado de la piel y actúa como todo en uno: limpia, tonifica e hidrata. Está formulada a base de micelas, unas moléculas que atraen la suciedad y el sebo de la piel del rostro, aislándolos y transportándolos a través del agua para eliminarlos.
Es una de las revoluciones en materia de cuidado de la piel y actúa como todo en uno: limpia, tonifica e hidrata
CREMA REAFIRMANTE
Aporta densidad a la piel (mayor consistencia de dureza y firmeza). Estimula la producción de colágeno. Se aplica en trazos largos en forma ascendente. Viene en presentación de día o de noche.
CREMA ANTIARRUGAS
Disminuye y atenúa las líneas de expresión, retardando la aparición de los pliegues pronunciados en la piel. Se aplica siempre en trazos largos, al contrario del sentido de las arrugas.
CREMA CONTORNO DE OJOS
Con una textura poco oleosa, es especial para el área de los párpados, la cual es más delgada. Se aplica sobre la parte orbicular con el dedo anular y en pequeñas cantidades.
CREMA CONTORNO DE LABIOS
Especial para el área de los labios para aportar mayor hidratación. Se aplica en forma circular alrededor de los labios. Ayuda a mantenerlos jóvenes e hidratados, evitando la aparición de pliegues, ‘código de barras’ o marcación de comisuras.
CREMA DE NOCHE
Es complementaria a la rutina de cuidado básico. Se puede usar a cualquier edad, pero es recomendada a partir de los 30 años. Se caracteriza por tener un nivel más alto de los componentes cosméticos que lleva, lo cual hace que penetre hasta las capas interiores de la piel y haga un trabajo más intenso y reparador. Su acción se potencia con el descanso y el sueño, logrando efectos reparadores. Antes de usarla, hay que limpiar y tonificar la piel, para que la crema efectivamente penetre y haga su efecto. También viene en presentación de sueros, gotas y jaleas.
MASCARILLAS
Productos con altas concentraciones de aportes cosméticos que hacen que el efecto buscado se vea de forma inmediata. Se deben aplicar con la piel limpia y dejar actuar según indicaciones. No remplazan las cremas o rutinas de cuidado habituales. Se recomienda aplicarlas dos o tres veces por semana.
SUERO ANTIOXIDANTE
Se debe usar con la piel limpia y actúa en las capas más profundas, por lo que se recomienda utilizarlo en la noche, con movimientos ascendentes desde el cuello hasta la frente. Se recomiendan para acciones específicas como lifting, revitalizantes o antiedad.
SUERO FACIAL
Se recomienda su uso a partir de los 30 años, pues las pieles más jóvenes no los van a necesitar.
PROTECTOR SOLAR
Producto que contiene filtros que ayudan a bloquear o protegernos de los rayos dañinos del sol; viene en diferentes texturas, es importante buscar la adecuada para cada tipo de piel. Se debe aplicar 20 minutos antes de la exposición solar de manera abundante y repetir cada cuatro horas en caso de no tener sol directo, o cada dos horas en exposición directa.
HIDRATANTE DE LABIOS
Barra o cera que permite brindar los aceites necesarios para mantener los labios hidratados y protegerlos de las agresiones externas. Ideal aplicarlo en las mañanas.
Rutina para todos los días
En relación con la rutina de cuidado de la piel, dice Carvajal, es importante tener en cuenta que los productos más ligeros se deben aplicar en primer lugar y luego los más densos. La razón: estos últimos regularmente tienen moléculas más grandes, que pueden impedir la penetración de algunos componentes.
El orden recomendado de una rutina diaria es:
1. Limpiadora.
2. Tónico.
3. Suero antioxidante.
4. Crema contorno de ojos.
5. Crema reafirmante o crema antiarrugas.
6. Protector solar.
7. Hidratante de labios.
En la noche, repetir la limpieza y aplicar la crema de noche.
Fuente: www.eltiempo.com
Foto: www.somosmamas.com.ar